El avance tecnológico en el sector de la automoción está creciendo cada vez más. Una de las áreas en las que más se está trabajando es en el desarrollo de sistemas para la conducción autónoma. ¿Sabes en qué consiste? Si no es así, desde Surmoción te explicamos todo lo que necesitas saber sobre este tema y las ventajas que puede ofrecerte. ¡Toma nota!
Conducción autónoma: en que consiste
La conducción autónoma hace referencia a la tecnología que permite conducir un coche sin tener intervención humana, es decir, que puede circular por sí mismo hasta un destino definido, incluso en vías que no han sido diseñadas para tal fin. Sin embargo, dado los avances que hay en este campo, en 2013 un organismo global estableció una clasificación para diferenciar entre varios niveles de autonomía. Por el momento, el modelo con mayor autonomía que hay en el mercado solo ofrece un nivel 3 sobre 5, y es que todavía se están analizando diferentes equipamientos para garantizar la máxima seguridad vial en todos los niveles de autonomía.
Cómo funciona un coche autónomo
Un coche autónomo utiliza radares, cámaras y sensores de lo más avanzados para informarse de todo su entorno y poder circular por sí mismo y garantizar toda la seguridad tanto a los ocupantes como a los demás usuarios de la vía. Además de ello, estos vehículos cuentan con un excelente equipamiento electrónico, el cual procesa toda la información recogida por los anteriores elementos citados. De esta forma, los sistemas de asistencia a la conducción pueden actuar de forma correcta y segura, siguiendo en todo momentos las normas de circulación vigentes.
Tipos de conducción autónoma
Dentro de la conducción autónoma hay diferentes niveles, según los sistemas que equipan los coches y que ofrecen un modo de conducción u otro. Esta clasificación se inicia por el nivel 0, que define a los vehículos sin autonomía, los cuales circulan 100% bajo la intervención del conductor. Esto no quiere decir que estos vehículos no cuenten con sistemas de seguridad, sino que los que equipa no hace que pasen a la siguiente categoría. Hay que destacar que, desde 2014, los sistemas ABS y ESP son obligatorios en los modelos nuevos.
- En el nivel 1 están incluidos la mayoría de los modelos de hoy en día. Los vehículos de este nivel están dotados de asistentes de ayuda a la conducción no muy avanzados, pero que toman partido en la conducción. Ésta es la principal diferencia respecto a los de un nivel anterior. Los sistemas con los que cuentan este tipo de vehículos son la alerta de cambio involuntario de carril, el control de velocidad de crucero o el sistema de frenada automática de emergencia, entre otros. En todos ellos, la mano del conductor no interfiere en la maniobra, ya que este sistema trabaja por sí solo.
- Por otra parte, están los coches semiautomáticos que son considerados como la opción básica de autonomía. Se trata del nivel 2 y estos vehículos son capaces de realizar de forma autónoma tareas como si fueran el conductor, ya que incluso toman el control del volante o de los pedales. Nos referimos a sistemas como el de aparcamiento automático o el control de crucero adaptativo.
- En el mercado de la automoción por el momento solo se ha alcanzado el nivel 3 de autonomía en modelos comercializados. En este caso, el coche es el que toma el control y se muestra un salto cualitativo en lo que respecta a su equipamiento tecnológico. Y es que los coches con nivel 3 de autonomía incorporan sistemas que permitan que el vehículo sea capaz de realizar todo tipo de tareas de conducción, sin embargo, el conductor debe de estar alerta e intervenir cuando el sistema desconoce cómo actuar.
- Si vamos un paso más allá, el nivel 4 se caracteriza porque el sistema se hace cargo de la conducción incluso en las situaciones más difíciles. Los sistemas de conducción están pensados para que puedan enfrentarse a situaciones de peligro y realizar las maniobras sin necesitar de la intervención humana sin el mínimo riesgo. Al igual que en el nivel 3, en esta categoría, el conductor también puede elegir cuando pone en funcionamiento los sistemas. Sin embargo, en este caso, el coche puede retrasar la desconexión si lo considera oportuno.
- Por último, el máximo nivel en la escala de autonomía es el quinto. Se trata de un modelo de conducción totalmente autónoma y que comprende todas las acciones y tareas del conductor. En este caso, los vehículos no cuentan con pedales ni volantas, ya que no es necesario en ningún momento la intervención del ser humano.
Ventajas de la conducción autónoma
Una de las mayores ventajas que ofrece la conducción autónoma está relacionada con la seguridad vial, ya que gracias a este modelo de conducción podrás evitar errores humanos al volante, los cuales provocan el 90 % de los accidentes de tráficos actualmente. Por otro lado, cabe destacar la facilidad y la comodidad que ofrecen los diferentes sistemas de ayuda a la conducción a la hora de manejar el vehículo. Esto hará que disfrutes de una conducción más tranquila, relajada y confortable.