Cuidar adecuadamente la batería del coche es fundamental para alargar su vida. «¡Ayuda, mi coche no arranca!». Esta llamada de emergencia se repite cientos de miles de veces al año. Dentro de las averías que se dan, uno de los primeros motivos siempre es el relacionado con problemas de batería. Especialmente en invierno, este elemento sufre mucho y puede boicotearte el arranque de tu coche por la mañana. Por qué sucede esto y de qué manera puedes evitarlo es algo que vamos a aclarar aquí.
Las bajas temperaturas, demasiados trayectos cortos o los consumos innecesarios suelen ser las causas habituales que impiden arrancar el coche en invierno. Cuando el termómetro se chiva del frío, el rendimiento de la batería desciende considerablemente y el motor requiere, más que nunca, mucha energía para ponerse en marcha. Además, numerosos coches se emplean a diario para trayectos cortos. En ese caso, el alternador no tiene tiempo para volver a cargar la batería del todo. Con los coches modernos, que van equipados con mucha tecnología y con sistemas como el start-stop, la demanda de electricidad no deja de ascender. Por eso, quien no controle atentamente el estado de carga de su batería podrá tener sorpresas desagradables.
Pero no es tan complicado tener este elemento a punto y pasar con él el invierno sin percances. Un mantenimiento regular de la batería evita fugas de corriente. Para quienes realizan trayectos cortos hay que tener esto en cuenta: evitar consumos innecesarios de electricidad y volver a cargarla del todo con algún recorrido largo.
Por otro lado, las baterías más modernas tienen algunos sistemas que ayudan a prolongar su vida. Si el coche no se va a mover en un tiempo, es recomendable desconectar la corriente con un cortacorriente tipo interruptor y cargarla con regularidad. Y no olvides que las baterías tienen garantía. ¡Guarda el tique!
CASO 1: Consumidores de corriente ‘ocultos’
El problema de la batería
Una pérdida de corriente por descuido suele dar problemas en el arranque. Es habitual dejarse la luz de cortesía encendida y eso puede tener consecuencias fatales.
Así se cuida la batería
Si todas las lucecitas del habitáculo permanecen apagadas al girar la llave, significa que la batería suele estar vacía, sin más. Lo normal es que baste con una ayuda al arrancar mediante cables o una recarga con un generador específico.
CASO 2: DEMASIADOS TRAYECTOS CORTOS
El problema de la batería
Si el motor de arranque, al girar la llave, responde con ‘flojera’, puede ser que los tiempos de conducción no sean suficientes para que el alternador cargue la batería.
Así se cuida la batería
En invierno, las luces, la calefacción y el propio motor de arranque requieren mucha corriente. Desconecta todo lo prescindible. Lleva a cabo algún trayecto largo o conecta la batería a un generador. Hay apps que monitorizan tu batería.
CASO 3: Muerte definitiva
El problema de la batería
A veces, incluso con largos trayectos o después de cargarla, la batería vuelve a vaciarse del todo rápidamente, sin ninguna derivación, y el motor no arranca.
Así se cuida la batería
Probablemente la batería está defectuosa y debes cambiarla. Hay que tener en cuenta que este elemento no es eterno en un coche. Tras cinco o seis años, suele dejar de funcionar. Un test de la batería te dará información de su estado. En el libro de instrucciones del coche se indica qué batería es la indicada para tu modelo.
Así devuelves a la vida a las baterías descargadas
Para devolverle la vida a tu batería, lo importante es seguir el orden correcto. Primero, conecta la pinza del cable rojo al polo positivo de la batería vacía y el otro extremo al polo positivo de la batería donante. Luego, conecta una pinza del cable negro al polo negativo de la batería cargada y, a continuación, pon la pinza restante a una zona metálica del coche averiado, por ejemplo, el bloque motor. Arranca el motor del coche ‘suministrador’ y déjalo encendido. Arranca este segundo vehículo y luego retira con cuidado los cables en el orden inverso.