Estamos en una época del año en la que salimos de casa con mucha ropa por el frío y nos metemos bien abrigados en el coche, que suele estar en la calle y a bajas temperaturas. Este es uno de los errores que tenemos que evitar. Aunque creas que no conlleva ningún riesgo conducir con el abrigo puesto o con tu bufanda y guantes, no es así.
Estos son algunos de los consejos que debes tener en cuenta a la hora de ponerte al volante en invierno:
- Circular con abrigo puede resultar peligroso, ya que llevar demasiada ropa provoca que el cinturón de seguridad no funcione de manera eficiente debido a que el airbag o sistemas de retención no están preparados para una distancia con ropa abultada y podía dar error en caso de accidente.
- Quitar el abrigo a los niños antes de sentarse en las sillas de retención es primordial para que los cinturones vayan lo más pegados al cuerpo posible.
- Conducir con un abrigo como puede ser un “plumas” limita nuestros movimientos, ya que no nos permite movernos con la misma rapidez que sin el abrigo. Sobre todo, no permite mover nuestros brazos a la velocidad correcta.
- Aunque realices un trayecto corto, es recomendable no conducir con gorro ya que disminuye nuestras capacidades auditivas. Lo mismo ocurre con los guantes. Usándolos mientras conduces, pierdes adherencia al volante y a la palanca de cambios.
- Aunque pienses que llevar bufanda o gorro no tiene ningún inconveniente al conducir, en realidad si lo tiene. En caso de tener un accidente, puedes quedarte atrapado en el interior del vehículo e incluso provocarte la asfixia actuando la bufanda como si fuera una soga.